Días 12, 13 y 14: Entrando a Perú – Puerto Maldonado – Nuestra experiencia en la selva amazónica peruana.

El 11 de julio partimos de Brasileira para ingresar al Perú por el lado de su selva amazónica, al sudeste del país. El camino hasta la frontera siguió siendo bastante malo, a pesar de su ampuloso nombre “Estrada do Pacífico”. Ingresamos por la frontera Assis –Iñapari a la que vimos bastante tranquila, casi sin paso de camiones, a pesar de las expectativas sobre esta ruta que permite sacar los productos brasileños hacia el puerto de Ilho en el Pacífico. Lo paradójico fue que en todo el trayecto, solo nos cruzamos con un convoy de cinco camiones de Bolivia que volvían de llevar combustible a la ciudad de Cobija, la que no tiene comunicación con rutas de su propio país. Se recomienda cargar combustible en Assis pues el trayecto de casi 300 Km no tiene puestos (“grifos”) que vendan diesel tipo B2 o B3. El paisaje tuvo alguna variación, ya que se veían menos explotaciones rurales y algo más de selva. Aunque la actividad de los madereros se advierte como incesante y no tenemos dudas de que en un corto plazo toda esa zona será incorporada a la agricultura. Llegamos hasta Puerto Maldonado cruzando el flamante puente sobre el río Madre de Dios, recientemente inaugurado y que se constituye en el más largo del país (casi un Km).

Habíamos leído informes de que se trataba de una ciudad enclavada dentro de la selva amazónica con bastantes problemas urbanos, tales como falta de cloacas y caótica, en una descripción típica de un centro poblado base para las actividades minera y forestal, casi siempre ilegales. La verdad, es que se advierte una importantísima inversión pública destinada a ordenar y cuadrar la ciudad mediante la construcción de amplias avenidas, pavimentación de calles, mejoramiento de accesos, ampliación del sistema cloacal, etc., todo lo cual le está comenzando a dar a Puerto Maldonado, que próximamente cumplirá 110 años, una imagen de importante centro urbano. El tránsito es bastante caótico y está compuesto casi exclusivamente de moto taxis, carromotos, motos de carga y motos particulares. Los autos se ven muy poco, pero les aseguro que con las motos alcanza y sobra. Pagando 2 soles ($3,50) hasta dos personas se trasladan con rapidez y comodidad hasta cualquier lugar de la ciudad. El diesel tipo B2 con aditivos vale $5,80 el litro, aunque presumimos que cuando avancemos más al centro del país, lo encontraremos más barato. La comida en un buen restaurante, para dos personas y con cerveza vale no más de 100 pesos argentinos y se puede llegar a comer por 8 pesos en lugares populares (cerca del pequeño puerto de cabotaje) un platazo de pescado frito acompañado por ensalada y mandioca hervida. No se justifica prepararse la comida en la Combi. La primer noche dormimos frente a la plaza, la segunda en una reserva, y la tercera en un hotel con internet y baño privado por solo 50 soles (menos de 90 pesos argentinos).

El 12 de julio contratamos una excursión de dos días y una noche, que preveía navegar el río Madre de Dios, pasar la noche en un albergue rústico en la selva, visitar la isla de los monos y navegar el Lago Sandoval, dentro de la reserva Tambopata. En breves palabras, les podemos comentar que la experiencia deja un balance positivo, aunque no se crean de que se van a encontrar con una cantidad inimaginable de animales salvajes u orquídeas a cada paso (no son tantas y además hay que buscarlas en la época de lluvias que no es ésta). Por otra parte, como se toma un retazo de selva y se lo somete a la visita no masiva pero permanente de turistas, dista bastante la experiencia a la que suponemos se tendría en excursiones de muchos días en medio de senderos poco transitados. Aclaramos esto, para que los viajeros que se decidan por estos lugares, no lo hagan con expectativas exageradas que luego les produzcan innecesarias frustraciones. Resumiendo: conocimos la selva casi virgen (desde los senderos), vimos toda clase de monos, caimanes blancos y negros (estos últimos eran solo pequeñas crías), aves, hermosas mariposas, guacamayos, lobos de río, y pasamos una noche en medio de los sonidos de la selva. No estuvo mal.

Regresamos ayer, viernes 13 y hoy ya estamos preparándonos para comenzar a subir a cordillera de los Andes peruana de este a oeste con destino a Cuzco.

Luego les seguiremos contando cómo sigue esta historia.

Para ver las fotos, cliqueen en los siguientes enlaces: Vilhena hasta Brasileira – Brasileira hasta Puerto Maldonado – Pequeño viaje a la selva amazónica

Chau amigos!!